Voces en el silencio
Quejidos que el viento se los lleva
Palabras que van al vacío de los tiempos
El triunfo que no fue
Deseo incumplido
No hubo la sonrisa del milagro
Mas sí que existe
Ese instante con tu jardín de flores
Peleando al desierto
Adivinando el porqué de la decadencia
Este campo arado de ilusiones
Donde se recogieron tempestades
Mal rayo nos partió
Siempre hay un podría haber sido
Entonces surge la mano amiga
del fondo de los pozos
Dame agua
Ahora que tengo sed
Dame un camino
Aunque esté yermo de esperanzas
Sé que estás tú
Con eso me sobra y me basta
Es el todo y la nada
Nos abandonó este mundo
y deshabitamos muchos otros
Será que somos habitantes de un más allá
a tiro de piedra
(..) Peleando al desierto (...)
ResponderEliminarQuizás sea esa la clave la todo. Que nos hemos acostumbrado a pelear.
;)
Hemos destrozado este bello mundo y, lo peor, es que el ser humano no aprende. Es bueno tener a alguien que está y nos comprende. Es como la esperanza.
ResponderEliminarAbrazos.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEl amor continúa dentro de este poema y es el toque de esperanza que se requiere para seguir viviendo.
EliminarUn abrazo.
La de malas pasadas que nos da el corrector automático.