Coletazos de invierno moribundo
Llega el Sol hasta el día de la extinción final
Y en el corazón del acorralado
Frío en expansión
Un pensamiento censurado
Mil mentiras lanzadas a bocajarro
Sueldos en suicidio a mitad de mes
Pan a precio de mina de Potosí
Silencio de cementerio claudicante
El hambre cotiza en bolsa
Has lanzado tu vida en precario al contenedor de las ilusiones
Te fugas con los pieles rojas
A recuperar las tierras arrebatadas
Ajusticiar financieros cuchillo en mano
Iré contigo cuando salga de prisión
Corazón en vilo
Reclusos de un mundo depredador
Ayer me libré de la incineración
Cuando escape de la ejecución inminente
Iré en tu busca a plantar caracoles en campo de estiércol
Seremos huida y sueño de piel roja en días de liberación
Vaya, eres todo un soñador. Uno muy enigmático que sueña en clave.
ResponderEliminarÁngel, a recuperar lo perdido. Los caracoles tambien se estan extinguiendo, veo menos. Soñemos con esa piel roja y liberemos mentiras, y las tierra arrebatadas .Feliz domingo. Un abrazo
ResponderEliminarNi siquiera el sol puede calentar a un corazón helado.! No me gustan los pieles rojas, no son de fiar, prefiero ir sin armas a recuperar todo lo perdido.
ResponderEliminarHay demasiada miseria y es a ella a la que hay que incinerar.
Un abrazo, señor poeta.
Cierto, a los Pieles Rojas, los despojaron de todo. Yo también me iría con ellos y lucharía por sus derechos. Tristemente, tendría que ser un viaje al pasado, porque prácticamente los masacraron a todos. Solo dejaron a unos cuantos, pero como piezas de exhibición, para el turismo. Detesto a los gringos. Porque no se cansan de destruir pueblos enteros.
ResponderEliminarBesos.