El cielo quiere llorar ríos
Pero parece que no
Lo dejará para otro momento
Y aquí estamos
Con los peces muriéndose de sed
Si pudiéramos saciarnos de fuego
Seríamos eternos entre las llamas
Cenizas bailando el son de los vientos
Busqué tu beso de juventud en el lago de los sueños
Encontré arroyo embarrado y beso petrificado
Ya no es lo que era
Y tu recuerdo
Una burda mentira
Dibujábamos paraísos adolescentes donde residir
Y ahora...
Una vida a toda prisa y un bar cantando penas
Y nuestra revolución
Se fue a pique
Nos quedamos sin cartera sin hora y sin residencia palaciega
Déjame con mi espíritu paralizado
Seré árbol soplando a los incendios que veo venir... Inevitable
Me contaste un cuento
Al final la perdiz se fue con la felicidad a otra parte
Se hace tarde
El Sol no amaneció
La lluvia nos dio esquinazo
En tu mochila sólo hallé
dos derrotas y una huella sin destino
Se cierra el telón
Algún día un nosotros cambiará el decorado
Peones de un espectáculo siniestro
De momento
Las golondrinas vuelan desubicadas de tiempo y lugar
Aquí estamos, esperando ese humano que cambie el decorado, pero dudo de que exista o lo dejen decorar. Un abrazo Ángel.
ResponderEliminarEs desolador. Besos
ResponderEliminarEn el teatro de la vida suena el espectáculo. Se abre el telón esperando que todo haya cambiado, que brille el sol y que las lágrimas se conviertan en charcos. Pero no es así.
ResponderEliminarBajad el telón por favor, que no quiero verlo hasta que cambie el decorado.
Un abrazo Ángel.
El cambio climático y ese sol que nos seca el agua y las aves extraviando su camino. Terrible.
ResponderEliminarAbrazos
Espera a que las golondrinas encuentren el camino y síguelas. Ellas siempre encuentran lugares cálidos y acogedores a los que huir.
ResponderEliminarAsí como las golondrinas estamos los demás, sin rumbo, sin brújula.
ResponderEliminarAbrazo fuerte.