Día frío
Día de carne helada y ácido de limón
Día que amaneció tiritando... pero no mucho
Corazón helado
Sin calor no hay amores que valgan
Invasión de carámbanos en el hogar
No enciendes el fuego
Hay que ahorrar para comer
Se dispara la factura del robo y el crimen
Hasta para respirar hay que pagarles a los mercaderes del templo
Han privatizado hasta las ganas de vivir
¿Y tú qué haces acurrucada en el rincón con una manta raída?
Intentas entrar en calor
Mientras la oscuridad invade el universo
Te vino a la mente prender fuego al parlamento
Simplemente para poder calentarte
Ira dormida
Ira congelada
Droga por mar, aire y pantallas
para mantener a raya al rebaño
Frío en tu interior
Desapacible el viento helado que congeló el paso
Fuga y anhelante
Abracémonos con pasión y sin compasión
Que el día está fastidiosamente gélido
Y con la lluvia mirando para otra parte
La privatización fue un verdadero atraco en despoblado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Si, se dispara la factura, me gusta eso de que es un robo, otra forma de robarnos, algo enmascarada...Y sí, hay muchas heladas, pero no de nieve, y la lluvia huyendo... Feliz noche Ángel.
ResponderEliminarMe vino a la mente prender fuego al parlamento y no solo para calentarme, pero un día me di cuenta de que cuerpo y mente estan unidos y si te reprimes lo somatizas así que decidi tener cuidado con lo que deseo, pues algunos te perjudican más que ayudar.
ResponderEliminarLa ira fue compañera inseparable durante buena parte de mi vida, cuando empecé a escuchar a mi voz interior más que a los demás desapareció como por arte de magia. No la extraño nada, aparece a veces pero en cuanto la detecto, la despido, tengo otras cosas que hacer que abandonarme a un sentimiento que me atasca jajajajajaja pensarás que estoy como una cabra!!
La pasión es el mejor remedio para cuerpo y alma.
ResponderEliminarBesos.
Hace tiempo que todos los días son fríos. Tanta incongruencia, tanta mentira, tanto viento gélido convertido en miseria.
ResponderEliminarEmpezaría por congelar las facturas, los robos y a todos los que mueven los hilos de la desfachatez y la vergüenza.Y aunque raídas, cualquier manta cubre los corazones heridos y desgraciados.
Ángel, chapeau por tus palabras.
No sé dónde vamos a llegar, está todo demasiado loco o es que somos muy tontos.
ResponderEliminarYa tengo mis dudas...
Besos.