Fuimos
al río
Nos
dimos un baño gratificante
Nos
besamos
Nos
quisimos
como
si no hubiera mundo alrededor
Arrugados
salimos de las aguas
Atardecía
Nos
despedimos entre llantos de sirena
Nos
dimos el abrazo de la lejanía
Ojalá
que no nos volvamos a ver
Un
adiós siniestro
Un
hasta siempre circunstancial
Mejor
así
Hay
eternidades que duran un suspiro
Mientras
andaba entre las piedras
Pensaba
en el destino de tus pasos
A
kilómetros ya de mi alma
me
dirigía a la realidad del topo y la soledad
Alejado
de todo
Me
dispersé entre la gente
Aún
recuerdo el instante
Mas
tu cuerpo se ha difuminado
No
queda ni la sombra
Pero
amo profundamente tu memoria
Alguna
vez he vuelto
Al
río
Y
mientras contemplo la corriente pasar
Maldigo
ese ojalá
El
abismo nos concedió el deseo
¿Qué
habrá sido de ti?
Mañana
ya te habré olvidado otra vez
El
río
es
lo único que nos queda
Seguramente
para ti
Ni
eso
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