Si pudiera descansar
Aunque sólo fuera por un breve y miserable segundo
Y por qué no por una eternidad
La eternidad del momento
Acostarme en la yerba húmeda tras un día de lluvia
Mirar el cielo
Querer ser ave y maldecirme por mi condición de pedestre
Inamovible
Oler la fragancia de las flores de una primavera moribunda
Llamarte
Dejarnos escapar por bares y callejones sin salida
Salida a los vientos
Arrastrarnos al mar
Despedirnos en un para siempre
Y no tener nada que hacer
Ni hoy, ni mañana ni nunca
Pasear por cementerios
Y respirar la tranquilidad absoluta de los muertos
Si pudiera descansar
Dejar problemas y carestías en el abismo de la conciencia
Ser olvido de la prisa
Ser humano y no máquina inservible
Déjame
No me hables
No me entretengas
Soy el único superviviente en la desaparición de los demás
Respiro
Si pudiera descansar
Y deshacer la telaraña de la angustia y la opresión
Huir del cansancio
¿Se puede?
¡Se puede! ¡Claro que sí!, en el siguiente poema.
ResponderEliminarUn abrazo.
Quiero pensar que se puede, cada cual con lo que lleve en mano, aprovechando lo bello que a menudo se nos escapa.
ResponderEliminarÁnimos Ángel.
Un abrazo
Se puede, ya lo creo que sí, pienso muchas veces como tú, dejo volar la imaginación, arrincono todo lo que me hace daño y juego a recordar momentos felices. Estoy intentando salir de una depresión y me hace falta huir de los problemas y del cansancio.
ResponderEliminarMe ha gustado. Abrazos.