Pequeño
Te sientes pequeño
Minúsculo en un mundo inmenso
… en un universo inabarcable
Clamas al desierto
Te gustaría ser viento que va
Y que jamás vuelve
Mota de sal en la inmensidad del océano
Nada más que eso
Y algo menos somos
Alzas la vista
Día de lluvia
Dejas oír tu voz
Mojada en soledad
Sabes que nadie te escucha
Como a millones de almas sonrientes y dolientes
Apagas el televisor que te dicta como has de pensar
Ahora en tu nimiedad marchas a hacer cosas
Crees que son importantes
Sólo son formas de seguir adelante
Te quedas quieto
La avalancha de la vida te aplasta
No existe la misericordia
Amén
Pones tu vieja canción en el móvil
Una y otra vez
A veces la melancolía llega sin avisar
Paseas por las nubes en noches de tormenta
En busca de su compañía
Algo de que hablar
Un rato de palabra y buen vino
Se alzan gigantescas montañas a tu paso
Desapareces sin saber adonde vas
Ninguna noticia
Ni de él
Ni de ella
Ni de ti
Ni de ellos
Esquelas en la niebla a la espera de ser leídas
Cuando lo pequeño se hace inmensidad
Nos adivinamos invisibles
Vestidos de fragilidad
Dispuestos para la acción y el desarme permanente
Frágiles y fuertes, como sonrisas al viento, como el caer de la tarde, como trocitos de felicidad entre espacios de quietud.
ResponderEliminarBesos.
Inexistentes, intrascendentes, en la inmensidad del mundo.
ResponderEliminarUn abrazo.