Se hace tarde
El despertador graznó
Te levantas con los ojos vendados de telas de araña
Agua para despertarse
Una ducha rápida
Un desayuno frugal
Una apatía que mata al corazón
Caminas por las calles húmedas
El ladrido de perro al pasar
Siempre el mismo
Te vas a las cavernas
Coges el metro
Mascarilla en la boca
Apretujados en el vagón
Rostros en decadencia
Llegas a la oficina justo a tiempo
Conversaciones de mierda
Miras apesadumbrado el sitio vacío
que dejó tu compañera y amiga
La despidieron sin ton ni son
Por los ventanales
Se ven aves por el cielo paseando
Mañana te pondrás alas para volar
Y dejarás atrás rutinas y tristezas
La bota del poder aprieta cada vez más
Ya no sobran horas
El tiempo apremia
La furia ya despertó de su eterno letargo
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