Adónde ir
Si careces de camino
Si en tu huella no hay senda
Piedras en los zapatos
Hablemos alto y claro
El desierto está expectante
Aullaremos a la luz de la luna
Ayer nos dio por morir
Algún día resucitaremos
Qué alegría
Juerga loca todo el día
Nuestros sueños cumplidos veremos
Y si no vuelta a dormir
Es lo probable
Vivamos mejor en la mentira
Seremos sabios de la ignorancia
Y en las mañanas lluviosas y de frustración
Nos suicidaremos con rosas sin espinas
Acudiremos a nuestro velatorio
Cerrado por olvido
Triste vagar por el camposanto
Adónde ir ahora
Si el horizonte ya no existe en tu mirada
A veces uno se suicida por las mañanas y por las tardes reverdece y nada malo ha pasado.
ResponderEliminarUn abrazo, poeta de verdades.
Es un poema triste que rasga el corazón.
ResponderEliminarBesos.