Mira a ese hombre de camisa azul cielo y americana primaveral
A ese mismo que sale en la televisión
Propagador de mentiras y adoctrinador oficial
El hombre de rostro vacuo y mirada anodina
De profesión lameculos
Esbirro del sistema
Soldado del partido gobernante
Acabada las elecciones presidenciales
Espera impaciente que le caiga un cargo
Con sueldo millonario pagado a escote popular
¡Qué hay de lo mío!
Grita para a sus adentros podridos
Su amo le llama
¡Alabado sea el Señor!
Y ya tiene su ansiado cargo público
Su puesto consiste en cobrar
Y aquí haya paz y mañana saqueo
Y tú en la cola del paro
Viendo las mañanas pasar
Estamos aquí reunidos
Observando como nos escupen en la cara y dicen que llueve
El hombre del partido
Hombre de gustos ostentosos
Con coche de lujo en la puerta del restaurante
Se lo pagamos entre todos
Benditos seamos
Se ha de poner la otra mejilla
Y las que hagan falta
Trepa y vividor como todos sus compañeros
de partido y de los otros también
El latrocinio es el epicentro de sus asquerosas vidas
Hipocresía
Cinismo
Vanidad
Corrupción
La posmodernidad nos robó el pan
Y nos dejó el hambre
Una profesión indigna que cada día es más codiciada por más seres ruines, dispuestos a hacer lo que sea por ejercerla.
ResponderEliminarUn abrazo.
Así es con frecuencia.
ResponderEliminarBesos.