UN PASEO POR LA IMAGINACIÓN ASILVESTRADA

lunes, 15 de enero de 2018

ADENTRO MUY ADENTRO

Me miro en el espejo
Adentro muy adentro
una mirada atraviesa y desgarra la niñez perdida
Ese que hay delante
Barba canosa
Pelo que muere en el silencio de un ayer
Alguna que otra arruga que parlotea con el tiempo
El que siempre vence
Me pregunto a la caricatura desconocida ahí presente
Qué fue del pasado
Qué es lo que nos mantiene aliento y corazón vivos
Un deseo pertinaz de seguir adelante
Un camino que nos señale la victoria
En este mundo de derrotas persistentes
La flor que renació en el desierto
El que dejó de vender sus manos al diablo
Ahí veo héroes donde se mueren los deseos
Detrás del espejo
Una oscuridad infinita que me invade
Me cuenta que ya no cree en nada
Más que en el derribo
de toda esta cobardía que deja ciegos
a los que no quieren ver
a tantos muertos que asolan nuestras conciencias secuestradas
Difuntos por la guerra desatada al abrir la puerta de las tinieblas
donde nos marcaron a fuego
el código de barras
donde antes había un ser humano
desaparecido
Me voy por el barranco de mis pensamientos
Sin saber qué será de nosotros mañana
Tan sólo que el frío nos dejará helados entre los recuerdos
Inservibles
Trastos viejos y apartados
Risa enterrada
Desaliento
Nada fue lo que prometimos ser
Si no fuera por ese juramento
De ver en alguna mirada el fuego
de hachas, de cuchillos, de amor;
donde los avasallados derrocan a los dioses del Olimpo
donde presiden los verdugos a quienes servimos
Cuántas almas anónimas
dejarán de respirar por culpa de esta guerra sin cuartel
Andamos desarmados
Removiendo tumbas y jolgorios
buscando esa mirada
en la que hallar las brasas donde antes no había más que la nada helada de caricias
inexistentes, inexplicables
Se fue el vendaval
Me iré con la brisa de mar sin peces que atrapar
balsas de plástico
Nada más que eso
Cualquier día de abril de años por venir
Me marcharé con lo puesto
Ya no habrá anclas que nos amarren en el vacío del silencio
Será el triunfo de los que no escribieron la historia
Nuestro triunfo
Carreteras sin salida
Caen cuerpos en campos frondosos
Invisibilidad que esquiva las palabras nunca publicadas
Una caricia
para un rostro en escarcha
Me miro en el espejo
Intento ver las entrañas de toda esta mentira
y nos pusieron un alto precio por respirar
Quizá halle la respuesta al desvarío
Adentro muy adentro
Donde habla la muerte de nuestra orfandad

No hay comentarios:

Publicar un comentario