Ahora el sendero del abismo
Un caminar por resquicios de precipicio
El vuelo del buitre
La carroña de tu ser
Las tormentas del fin de un verano
Calles repletas de almas en pena
Yendo al presidio de la desdicha y la plantación algodonera
Mi pena bañada en aroma de rancio tomillo
Nos buscamos
Nos hallamos a pesar de la demolición
Un bar en la esquina
El sabor de un café alcantarilla
Vuelta a empezar
Vuelta al ruedo
Asta de toro clavada en la ingle
Charlamos sobre el coste de la vida
Y nos adivinamos muertos
Muertos que comen, padecen y ríen
Un piso en el extrarradio
Estamos fuera de la circunferencia
Planeamos una escapada de fin de semana
Carcajadas ilusorias de liberación
Arrugas en los ojos
Visión distorsionada de la irrealidad
Efímero beso en los labios
Tarde ya para sobremesas de éxtasis y paredón
Salgo
Paseo al perro de mis mañanas
Desaparezco entre nieblas de sueño sin redención
La ciudad se llena de existencia artificial
Corazones de latón
Pulmones de carbón
Y ruido...
Demasiado ruido
Destruyen las palabras
Te atrincheras en la cama
Esperan con impaciencia las alimañas
Son el mal que no queremos ver
Fichas tu precariedad laboral
Pronto saldrá el sol
El espinazo está a punto de romperse
¿Se truncaron las esperanzas?
Atisbo páramos en la plenitud de lo inalcanzable
Qué pasará
Una hora después
Pantalla en blanco
Lo único que hay es presente mientras haya latidos
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