El
muro frente a mí
Al
lado del silencio
Lo
que no queremos escuchar
El
murmullo de algo que se acabó
La
agonía en defunción
La
risa de la angustia
Cuando
nos tiene atrapados
Salir
de la confusión
Y
seguir a lo nuestro
Que
ni era tuyo ni era mío
El
gato que maullaba al frío
El
día acabó de fusilarnos
Renaceremos
una mañana de lluvia
Ahora
mi declive es el renacimiento de las rosas
Volveré
a ser espina
Clavada
en el corazón de los cobardes
Que
ven salidas
En
los torbellinos homicidas
Cuando
están cubiertos de flores plastificadas
En
estas noches que saben a vino rancio
Pero
observo en tus ojos
Las
pupilas liberadoras
Del
momento que cubrió de muerte
La
esperanza que marchó a funerales
De
los vanagloriados
De
los triunfadores de la farsa y el espectáculo
Que
es una pantallita de televisión
Donde
los más crédulos
Se
mienten cantando aleluyas
El
reloj despertó la mano que duerme
La
angustia del que se va
Otra
vez al mismo lugar
Donde
las termitas comen ruina
Voces
que llaman a difuntos
Esperando
la caída del sol
Para
despertar un instante
En
la fantasía que sabe a pólvora mojada
Mejor
la realidad
Buscando
las balas que fusilen las pesadillas
De
los crepúsculos
La
luz acabó su recorrido
Es
la hora del recogimiento
Pensar
Una
larga noche en la oscuridad
Cómo
afrontar las tinieblas
Y
el nuevo día
Callados
están los desertores de la rabia
Los
lacayos de la herida abierta
En
la espalda sangrienta
Zapatos
de suela gastada
Dobladillos
rotos barriendo la arena
En
el aliento del olvidado
Se
hallará la senda
Que
degüelle el destino
De
la miseria callada
Que
no habla
El
bastón de mando se apropia de sus silencios
El
engaño viene
Nosotros
nos vamos
A
recoger las simientes de los vientos
A
gritarle a la locura
La
redención de los dioses sin poder
La
lágrima que brota
De
las manos rotas
Condenadas
a trabajos forzados
En
la tiranía del progreso
En
la dictadura del consumo
En
el alma sin vida
Donde
habita el terror de las apariencias
Alimentando
suicidas ilusiones
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