Se han levantado los fríos
En este amanecer de despertar incierto
Me quedaría eternamente en el calor de la cama
Con bostezos y titiritar de huesos
Me levanto para ir hacia lo inciertamente cierto
Me ducho con agua en ebullición
Un frugal desayuno
La despedida
Y a cruzar bosques metálicos y calles descuartizadas
El viejo tren que para en la estación
Me subo
Me quedo guardando equilibrios
Me apeo en la parada acordada
Voy al destino de los buitres
Seré la carroña
Seré el vencedor en la derrota
Seré un número menos en la ecuación
Preguntas para un desierto sin oasis a la vista
Cuando acabe de achicar charcos
Me iré con la música a otra parte
Que ya conozco
Me esperas en el sueño del nigromante
Volvemos al hogar
Hay grietas en el tejado y en el sendero del corazón
Una comida para olvidar preocupaciones y sogas en el cuello
Es la noche
Un cielo con amnesia de estrellas
El perro me saca a pasear
Y vuelvo a la soledad de un lamento alegre
Visiono una película que olvido antes de comenzar
Recuerdo el día
Recuerdo pasados muertos
Recuerdo un río antes de dormir
Recuerdo
Mas no me acuerdo de ti
Y eso que te vi hace ya horas entre marismas de escarcha
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