miércoles, 27 de noviembre de 2024

LA TARDE SE QUEDÓ SIN MAÑANA

Salí demasiado tarde de casa

Salí demasiado tarde de la escuela

Salí demasiado tarde a la vida

Tarde siempre

Llegué tarde a la cita

No había nadie

Ni siquiera estabas tú

Una odisea cada mañana

Un insomnio sin ovejas que contar cada noche

El despertador herido por los golpes que le di

Y sigue sonando

Demasiado tarde para quedar con los muertos que dejé atrás

Un café y me quedo en el piso

Se cae a trozos

Ya da igual

Tapio el cielo y se apaga una estrella

Juego al ajedrez y guillotino al rey

Me salto el día del juicio final

Me declaro culpable

Doy una vuelta por los infiernos cotidianos

Me encuentro con este, con ese, con aquel

Menos contigo y la hora se suicidó en el último minuto

Demasiado tarde para ser camino en este callejón sin salida

Cierro la ventana

Apago la luz

Y en la oscuridad

Espero el retorno de lo que jamás llegará


1 comentario:

  1. Tarde... Tarde para qué, según quién. Quién marca el ritmo y nos subyuga a una vida de prisas en la que nunca llegamos a tiempo...? A ese quiero guillotinar, mirándole a los ojos.

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